sábado, 11 de junio de 2011

PUNTO 8: de la POLIS a la COSMÓPOLIS

Desde los griegos hasta el siglo XX el ideal de cuidadanía se ha basado en la pertenencia a una comunidad política concreta y diferenciada del resto: la polis griega, la civitas romana, la comuna medieval o el Estado moderno se han basado en mecanismos de inclusión y exclusión  que establecen quién puede ser o no ciudadano.
En la actualidad aún persisten barreras que impiden a un buen número de personas disfrutar de sus derechos. Hablamos de inmigrantes, de los apátridas, de los refugiados, es decir, de aquellos que nadie reconoce como ciudadanos.
Hoy en día estamos asistiendo al declive del modelo político del Estado nacional. La creciente interdependencia de las distintas regiones del mundo, la influencia de enormes agentes económicos en la toma de decisiones de los gobiernos, el espectacular aumento de la movilidad y la creación de redes globales de comunicación y opinión que socavan los propios fundamentos del Estado y dan paso a un nuevo contexto que Habermas ha bautizado como ERA POSTNACIONAL.
Aunque seguimos viviendo en un mundo constituido por naciones interdependientes, en realidad su soberanía se va reduciendo y los gobiernos estatales ven cómo su esfera de influencia tiende a disminuir.
Esto no significa que los Estados estatales dejen de existir de la noche a la mañana.
Si nos planteamos retos que tienen dimensión global, las respuestas tendrán que ser necesariamente globales.